Historia del Colegio

COLEGIO MIRADOR – FEDUCA
Fundación Educacional Comunidad y Aprendizaje

 ¿Quién es COLEGIO MIRADOR – FUNDACIÓN EDUCACIONAL COMUNIDAD Y APRENDIZAJE FEDUCA?

FEDUCA es una institución social, sin fines de lucro, fundadores y creadores del Colegio Mirador de Puente Alto y del Colegio San Fernando de Peñalolén. Nuestra gente forma un equipo de trabajo profesional con una fuerte presencia de compromiso social, alineados con los objetivos propuestos por la autoridad de educación, la fundación educacional y el colegio. Buscamos mejorar continuamente todas las áreas de nuestro quehacer, basados en principios, análisis permanente de los contextos y los diagnósticos, normas claras y la búsqueda de la innovación en los procesos educativos.

 Nuestro norte son los estudiantes y su formación, en las más amplia gama de asistencia que podamos proveerles en esta etapa de sus vidas, con la idea de formar personas que asuman roles protagónicos en el Chile de los próximos años y contribuyan, desde sus espacios de desarrollo, con los valores indispensable para vivir en sociedad.

Tenemos una larga trayectoria y experiencia profesional en el ámbito educativo, pero sobre todo un enorme cariño y respeto por la comunidad escolar.

Como equipo buscamos asegurar el logro de metas con foco en la enseñanza (las prácticas docentes) y los aprendizajes de todos nuestros estudiantes, fortaleciendo las condiciones para el logro de estas metas y generamos un monitoreo eficiente y responsable que permita desplegar el potencial de todos quienes trabajamos o estudian en el colegio, especialmente el de nuestros estudiantes.

Por otra parte, tenemos plena conciencia, gracias a experiencias personales, y profesionales, que la educación genera movilidad social y hace que nuestros estudiantes mejoren sus posibilidades para acceder a mejores condiciones de vida, tanto para él o ella, como para sus familias actuales y futuras.

 ¿Hacia dónde nos dirigimos y por qué?

 La forma en que se necesita aprender para el siglo XXI es distinta no sólo para los alumnos, sino también para quienes trabajamos en educación. Por eso, buscamos ser la educación para niños, niñas y jóvenes del siglo XXI, trabajamos para ser motor de movilidad social que aporta a la transformación de nuestro país, logrando ser más justos, democráticos y donde todos y todas se sientan partícipes de un espacio común, donde sea posible crecer y desarrollarse plenamente.

 Nuestro trabajo se centra en la colaboración, el aprendizaje mutuo, en el desarrollo profesional y en el trabajo con impacto. Nos moviliza la comunidad, el aprendizaje, la diversidad, la inclusión, la innovación y la excelencia para que el impacto de nuestro trabajo sea profundo y perecedero en los millares de niños, niñas y jóvenes que están llamados a ser mejores personas para hacer más grande a nuestro país.

 Vemos la educación como futuro, como medio transformador, “La educación no cambia al mundo, cambia a las personas que van a cambiar al Mundo” – Paulo Freire.